Los simios son los parientes vivos más cercanos a los humanos. Comparten nuestro ADN y pueden utilizar herramientas y resolver problemas como nosotros. Su comportamiento es tan parecido al nuestro que es fácil olvidar que no son personas: no llevan pantalones, ni conducen coches, ni publican memes en Facebook. Pero mientras nosotros nos dedicamos a ser humanos, hay muchas razones por las que muchos simios están en peligro de extinción. Éstas son algunas:
Están siendo cazados para carne de caza.
Caza y caza furtiva. En algunas partes del mundo, los simios se cazan para obtener carne de animales silvestres. La palabra «carne de animales silvestres» se refiere a los animales de caza que se cazan para alimentarse en África Central y Occidental. La carne de animales silvestres también puede utilizarse como un manjar o un animal ceremonial en estas zonas, pero la mayoría de las veces es utilizada como alimento por personas pobres que necesitan una forma alternativa de alimentar a sus familias.
El comercio ilegal de carne de simio es especialmente común cuando se trata de chimpancés, una especie que se encuentra en muchos países de África y Asia (incluida China). Se consideran un manjar en algunos países, donde también se utilizan en la medicina tradicional o en ceremonias como bodas o funerales. Y aunque los precios varían según el lugar, un chimpancé puede venderse entre 10 y 25 dólares por kilo, lo que significa que quienes se dedican al transporte ilegal de chimpancés pueden ganar miles de dólares con un solo animal.
Su hábitat está siendo destruido.
La destrucción del hábitat es la mayor amenaza para los simios. Suele deberse a la tala de árboles y a la agricultura, a proyectos de infraestructuras, a la minería o a la extracción de petróleo.
Se venden como mascotas.
El elevado coste de mantener un simio como mascota es probablemente la razón más importante por la que están en peligro de extinción. Un chimpancé o un gorila puede vivir hasta 60 años, por lo que hay que cuidarlo durante todo ese tiempo. El coste de alimentar a un simio es muy alto: un chimpancé necesita alrededor de 2 libras (1 kilogramo) de comida cada día, mientras que los gorilas necesitan 3 libras (1 1/4 kilogramos). El alojamiento de un simio también cuesta dinero: Necesitan jaulas grandes y algún tipo de recinto al aire libre donde puedan jugar. El adiestramiento de los simios también es caro, porque hay que contratar a personas que sepan cómo adiestrarlos correctamente, y este tipo de expertos no son baratos.
Están siendo capturados en el comercio ilegal de vida silvestre.
El comercio ilegal de animales salvajes es un problema importante. Las crías de simios se venden como mascotas, las abejas como alimento (o «jalea real») y los simios con fines de investigación.
Pero la forma más habitual de que los simios acaben en cautividad es cuando son capturados por cazadores furtivos. Los cazadores furtivos los capturan y los venden a personas que quieren mascotas exóticas o animales de zoológico. También los venden para la investigación médica, lo que puede significar cualquier cosa, desde probar medicamentos en los simios hasta realizar pruebas invasivas que causan dolor y sufrimiento a los animales implicados…
Están amenazados por el virus del Ébola y otras enfermedades.
El virus del Ébola es una enfermedad zoonótica, lo que significa que puede transmitirse de los animales a las personas. El virus provoca una fiebre hemorrágica que afecta a múltiples sistemas orgánicos y suele provocar la muerte. No hay vacunas ni tratamientos para el virus del Ébola, por lo que si se infecta con la enfermedad, su médico probablemente le recomendará cuidados de apoyo (como antibióticos o diálisis) hasta que su cuerpo sea capaz de combatir la infección por sí mismo.
En los raros casos en los que alguien se recupera de una infección de ébola sin recibir medicación o transfusiones, seguirá teniendo anticuerpos en la sangre durante varios meses después de la recuperación, pero esto no significa que no pueda volver a enfermar más adelante porque todavía no ha creado defensas naturales contra otras cepas del virus. Es importante tener en cuenta que la mayoría de las personas que han estado expuestas no enferman de inmediato; los síntomas suelen aparecer entre 8 y 21 días después de la exposición
Es difícil saberlo específicamente, pero hay varias categorías de explicaciones en las que se han centrado los investigadores
Las razones del declive de las poblaciones de simios se siguen investigando, pero hay varias categorías de explicaciones en las que se han centrado los investigadores.
- La pérdida y degradación del hábitat es probablemente el factor más importante que contribuye a poner en peligro a los simios. A medida que los humanos siguen invadiendo su territorio, animales como los gorilas y los chimpancés pierden a menudo el acceso a la comida y al refugio. Esto puede conducir a la inanición o a otros problemas de salud que acaban causando la muerte.
- La caza furtiva es otra de las principales amenazas a las que se enfrentan los simios, ya que son animales cada vez más escasos en las zonas de África y Asia donde viven en libertad. Dado que los cazadores furtivos están cada vez más desesperados, es probable que esta forma de caza ilegal aumente a menos que los gobiernos y las organizaciones de conservación de todo el mundo tomen medidas más estrictas.
Las causas del declive de los simios son complejas y variadas. Hay muchas amenazas diferentes para su supervivencia, lo que puede llevar algún tiempo comprender. Además, es difícil estudiar a los animales que viven en bosques o selvas remotas porque son lugares difíciles de trabajar. Pero los investigadores hacen lo que pueden con lo que tienen a su alcance: conocimientos, financiación de gobiernos y organizaciones benéficas como el WWF (Fondo Mundial para la Naturaleza), equipos como rastreadores GPS para seguir a los animales a distancia mediante señales de satélite, etc.